Un turbio asesinato perturba la apacible ciudad de Castellón de la Plana...Castellón de la Plana. Un vagabundo aparece brutalmente asesinado en el cajero de una oficina bancaria de la céntrica Plaza de la Independencia, conocida popularmente como la Plaza de la Farola. El inspector Bartolomé Monfort se traslada desde Barcelona para trabajar en el caso, a petición del jefe de la Policía de la capital de La Plana. Monfort, de padres castellonenses y con un pasado tan triste como turbio, investiga este extraño caso en el que se mezclan la codicia, las drogas, la envidia, la venganza y otras miserias poco aireadas de una pequeña ciudad acomodada de provincias en la que aparentemente nunca pasa nada. El inspector Bartolomé Monfort echará mano de su poco apego a la vida, para desenmascarar uno de los más extraños casos de asesinato ocurridos en esta apacible ciudad.
Elegí este libro por un único motivo: toda la acción se desarrolla en mi ciudad, Castellón, lo que despertó mi curiosidad. El autor se extiende bastante en detalles de la ciudad. Calles, callejuelas, edificios, restaurantes, incluso pueblos de la provincia como Benicasim y sus emblemáticas villas, donde se desarrolla parte de la acción. Entiendo que este hecho, que a mí me ha gustado y me ha hecho sonreír porque puedo visualizar perfectamente cada escenario, puede resultar tedioso para una persona que no lo conozca, ya que hay muchos detalles que no aportan nada a la trama. En cuanto al argumento, con este libro el autor inicia una saga, la del inspector Bartolomé Monfort de la policía de Barcelona. El inspector Monfort ha sido requerido desde Castellón para ayudar a esclarecer un crimen: un mendigo aparece asesinado en un cajero automático de una céntrica plaza de la ciudad. No es un thriller, es una novela de investigación policial. Al principio de la investigación apenas tienen un fino hilo del que tirar, pero poco a poco van estirando de él hasta llegar al esclarecimiento del crimen. Sin ser un gran policial, me ha atrapado y ha conseguido que a partir de la mitad del libro no haya podido soltarlo hasta descubrir al asesino. Seguiré con el segundo libro de la saga, a ver que nos depara.
Elegí esta novela porque la mencionaron en un programa de televisión, concretamente “Saber y ganar” (me encanta) y al ver que la trama transcurría en Castellón de la Plana, ciudad a la que estoy muy unida y conozco casi a la perfección, me despertó gran curiosidad. La elección ha sido fantástica porque, además de la conocida ubicación de la trama, calles, plazas, edificios y lugares tan emblemáticos como la cima del Penyagolosa, “el gigante de piedra que todo lo ve”, al igual que un personaje de la novela, también yo puedo admirar desde el ventanal de mi casa; además de eso, la investigación del caso te atrapa, siguiendo las pesquisas y atando cabos, convirtiéndote en la sombra del propio inspector de la novela, Bartolomé Monfort. La narración es ágil, amena y llena de intriga. Sin duda, seguiré los siguientes casos del Inspector Monfort. 25/02/2022
He pasado un rato agradable leyendo esta pequeña novela. De lectura sencilla y con un argumento que te atrapa enseguida: se encuentra el cadáver de un mendigo en un cajero automático de la ciudad de Castellón. A favor: es una historia clásica con un crimen misterioso que hay que resolver, un inspector con pasado traumático, una compañera lista y atractiva, un comisario que no ayuda nada, una trama familiar y vecinal que se va desarrollando...Bien, se deja leer. En contra: el autor consigue sorprenderme en un principio por el trato del argumento y los personajes pero poco a poco se va diluyendo y atascándose hacia el final cuando ya todo parecía ir sobre ruedas. Así con todo, éste es el comienzo de una saga del inspector Monfort y sus investigaciones. Otro punto positivo es la descripción de la ciudad de Castellón y su gastronomía, habrá que visitarla 😉