<P><B>«</B><I>Sentí las raíces apretando mis tobillos. Uno no deja de esperar porque se canse, uno deja de esperar porque cesa el ruido al otro lado y las raíces se secan</I>.<B>»</B></P> <P>Elvira Sastre revela en este libro su mundo interior y sus experiencias más íntimas. El diálogo que se establece entre el texto y las ilustraciones de Emba logra una composición estética única, digna de coleccionistas.</P>
Esta mujer es una artista, es arte. El arte que con pocas palabras te hace sentir millones de cosas, cientos de recuerdos, miles de kilometros. Poesía de vida, no solo amor, romance, olvido... te da vida, todas las vidas que olvidamos que vivimos a través de loa años. Es cortísimo, creo que leerlo no me tomo ni una hora y me regalo un monton de tiempos. Lo tengo en digital, no duden es pedirlo porque es algo que compartir. No iba a reseñar porque ya habia subido un par, pero se me salia la escritura del alma. Prometo que vale la pena, cada maldito segundo.
Como siempre, Elvira Sastre es una bocanada de aire fresco. Te quedas siempre con ganas de más. Un libro corto sin embargo bellísimo, cálido, directo al alma. Para leer entre libros complejos, y respirar aire de primavera. 🌹🌺🌸🌼
Tan breve como bello, un camino lleno de versos y poemas que te lleva al lugar donde conviven los recuerdos. Deliciosa lectura.
Me pareció hermoso, cortito pero hermoso. Las ilustraciones de Emba son perfectas y me hicieron conectar un poco más con los versos. Sin embargo sí me faltó un poco más de aquella vena tan apasionada que me cautivó en Baluarte, obra antecesora. Le puse muchos post-it y mucho amor al verme reflejada en varias de las páginas, ese es un punto a favor, conecta con el lector evocando sensaciones que ya conoce y que hasta aún le duelen... Para mí le faltó flujo, hubo mucho azar, pero eso no le quita el placer, lo disfruté.
Agosto/14/2018 Extraordinaria la forma de expresarse, cortos poemas pero llenos de grandes historias, es una arte eso de conseguir en muy pocas palabras relatar sentimientos y emociones . Y es que algunas grandes historias se cuentan con cuatro palabras, no hace falta mas , el arte es en saber escribir esas cuatro palabra que definan esa historia, Elvira Sastre tiene ese talento, y a mi personalmente me deja fascinada . El libro viene con unas preciosas ilustraciones sencillas, pero que hablan por si solas. Extractos del libro: No te conformes con las ventanas. Siempre hay que ir a por la puerta. Olvidar es construir un recuerdo sobre lo ya vivido. No hay nada peor que estar atrapado entre la distancia y el olvido. Dormir contigo. Despertar con sueños.
No sé cómo lidiar con esta nostalgia y esta falta de algo que decir, así que escribo para recordarme que una vez tuve todas las palabras en la punta de tu lengua.
No me siento perdida. Es sólo que no sé dónde termina el mar que llevo dentro y a veces me ahogo.
Ante el precipicio te arrancaste las alas sólo para entender el concepto de libertad.
Sentí las raíces apretando mis tobillos. Uno no deja de esperar porque se canse, uno deja de esperar porque cesa el ruido al otro lado y las raíces se secan.