AMAURY

Es curioso, porque teniendo en cuenta la sinopsis de la novela, me esperaba otro tipo de desarrollo centrado en líos amorosos o malentendidos provocados por los celos, por ejemplo, pero en realidad los celos me han parecido solo una pequeña parte de la historia. Lo que más me ha llamado la atención sin duda es el concepto de amor entre padre e hija, entre amigos, y entre novios, todo ello teniendo en cuenta el contexto histórico en que se desarrolla la trama; de otra manera, esto nos parecería el festival del amor tóxico. Es más, hay partes que resultan hasta cómicas de lo telenovelescas que resultan, con doncellas frágiles que se desmayan en cuanto su corazón empieza a desbocarse por amor, o el rival patoso que no acepta un no por respuesta (bueno, hoy en día el rival patoso es el acosador peligroso) Ha habido momentos en los que me ha dado la impresión de que la historia no iba a ningún lado por dar demasiados rodeos, pero en general, me ha parecido entretenida. No es una obra maestra, pero puede ser una buena opción si se tienen ganas de leer un romance del siglo XVIII, y luego, probar a compararlo con el siglo XXI