Este cuento ruso comienza en la década del hambre que precedió a la Segunda Guerra Mundial, y duró oficialmente hasta la caída del comunismo. A finales de la década de los 60 el régimen soviético se limitó a proporcionar a la población instalada en los bloques de viviendas de mala calidad, los bienes de consumo mínimos necesarios para garantizar la paz social. Sin embargo, el cuento de la abundancia roja había sido en sus orígenes una cosa muy seria: un intento por derrotar al capitalismo con sus propias armas y de convertir a los ciudadanos soviéticos en los más ricos del mundo. Por algún tiempo, llegó a parecer que la historia podría convertirse en realidad. Se invirtió en ella las esperanzas y el talento intelectual de toda una generación, y el deseo de una tiranía por alcanzar un final feliz. Este libro trata de ese momento.