A DOS METROS DE TI

“Quiero recorrer el mundo. En realidad, conocer el mundoy no el interior de los hospitales.” Este libro tiene una portada hermosa que refleja un poco el contenido que vamos a encontrar al leerlo. No les voy a hacer una sinopsis de la obra, pero si deseo compartir con ustedes lo que me genero la historia, porque dejo a flor de piel muchas emociones al sentir el dolor; la valentía; el anhelo de superarse aún a ellos mismos; la ilusión de vivir una vida saludables; la esperanza de encontrar una cura que acabara con la enfermedad que les aqueja no solo a los protagonistas, sino también a otros amigos que Stella y Will han encontrado en los hospitales; las alegría que trae compartir momentos pequeños con las personas que queremos; la aspiración de vivir la vida y hacer realidad los sueños que tienen en una lista de pendientes. El tema del amor es esencial, este sentimiento que sin saberlo se cuela de una manera sutil en nuestras vidas cuando menos lo esperamos, llega para fortalecer a los protagonistas y cambian la perspectiva que tienen de su realidad. Cuando las cargas se comparten son más llevaderas. La pérdida de los seres queridos también es un punto clave en esta narración, creo que nunca podremos comprender por qué las personas que amamos se van de nuestro lado, pero debemos continuar nuestro camino y superar estas situaciones. Otro aspecto que disfrute fue la construcción que hace de los personajes la autora, tienen ángel, chispa, aunque la vida se les va como agua entre los dedos veo en ellos tonalidades de blanco y negro, tienen una gran personalidad. Stella es una chica formidable que ve la vida con positivismo y quiere influenciar a los demás con él. Nos encontramos con Will es un joven con un corazón enorme que trata de utilizar máscaras para no permitir que las personas se le acerquen. Pero, cuando conoce a Stella descubro a un hombre atento, lleno de detalles, un amigo incondicional, con un poco de miedo porque no hay cura para su diagnóstico, que independiente de esto tiene una fuerza interior que no le impide derrumbarse y continuar viviendo con las limitaciones de salud. De manera general los personajes secundarios, amigos de los protagonistas son personas divertidas que pueden bromear con su enfermedad, disfrutar del espacio que tienen en los hospitales donde son ingresados y aunque no están físicamente en el texto, nos acompañan a través de las páginas hasta el final.

Me temo que este libro no está escrito para todos. Tiene un tema muy interesante, unos personajes jóvenes pero entrañables, está bien escrito y la trama se desarrolla a una buena velocidad, lo malo es que habla de algo que no nos gusta: de la enfermedad, y encima, una que ha recaído en unos adolescentes, que tendrían todo la vida por delante si la vida justa, pero cuando la fibrosis quística entró por la puerta, la justicia salió por la ventana. Escrito a dos voces desde el punto de vista de Estella, una joven que lleva muchos años luchando contra sus propios pulmones, y de Will, un chico que no puede acercarse a menos de dos metros de enfermos pulmonares. Los personajes secundarios también tienen su fuerza dentro de la trama, sobre todo Poe, me ha parecido magnífico. Es una lectura rápida pero nada cómoda, desde luego, me ha servido para liberar tensiones con la cantidad de frases exclamativas que he soltado, pero también porque no he podido evitar que alguna que otra lagrimita se me escapara, lo que, sabiendo que no soy fan de la novela romántica, tiene su punto extra. Me ha ayudado a comprender mejor esta enfermedad, pero admito que espero no tener que utilizar mis nuevos conocimientos adquiridos en ningún momento de mi vida.

Me ha encantado, es una novela fácil de leer, sencilla pero muy intensa. Si te quieres desahogar llorando un rato es perfecta. Los personajes son geniales, y la historia de amor de Will y de Stella te llega al alma, a mí me gustó mucho más que Bajo la misma estrella, a pesar de que la comparen, la única similitud es que un chico y una chica, adolescentes, se enamoran y que ambos tienen la misma enfermedad, pero por lo demás es totalmente diferente, te toca muchísimo más la fibra. Es un libro que te hará valorar más lo que realmente importa, que hay que luchar siempre por lo que se quiere y por quien se ama. Totalmente recomendado, ahora a ver la película y a llorar como una magdalena.

Hace mucho que no me pasaba por aquí, entre trabajos de la uni y demás pues 🙆‍♀️🙆‍♀️... 🌿Reseña🌿, A dos metros de ti, de Rachel Lippincott con Mikki Daughtry y Tobias Iaconis. Necesitamos estar cerca de las personas que queremos casi tanto como el aire que respiramos. Stella y Will tienen la misma enfermedad pulmonar y conviven en el mismo hospital. Cuando se enamoran, recuperan la alegría de vivir, pero hay un problema: por el peligro de contagio, tendrán que mantenerse siempre a dos metros de distancia para no arriesfar sus vidas. ¿Puedes amar a alguien a quien no puedes tocar? --- 🌟Me ha gustado muchísimo🌟. Es una historia muy ligera y cortita, pero cargada de mucho sentimiento e intensidad. Me ha parecido muy interesante conocer más acerca de esta enfermedad, de los riesgos que conlleva y el tipo de vida que llevan los pacientes. Es muy conmovedora y hace que nos demos cuenta de lo necesario que es el contacto con nuestros seres queridos, el poder tocarlos y abrazarlos. Stella es una chica muy organizada (diría que de manera un poco obsesiva jajaja😅😅) que le gusta tener todo bajo control. Sigue su tratamiento al pie de la letra, por eso, cuando se cruza con Will, este la saca de quicio porque es justo todo lo contrario. Pasa del tratamiento, de medidas de seguridad y lo único que quiere es poder salir del hospital, con lo cual vamos a tener un poco de enemies to lovers que tanto me gusta😍. Su relación es muy bonita, se va forjando a fuego lento y se nota la química entre los dos. Hay momentos muy tiernos y otros realmente duros. Con respecto a la película, he de decir que me parece una muy buena adaptación, aunque me quedo con el libro, ya que conocemos más a fondo a los protagonistas, sobre todo a Will y a su pasado, además del epílogo el cual no aparece en la peli😎. El final, no sé qué decir para no hacer spoiler, pero me sacó unas lagrimillas😥. Pd: resaltar la preciosidad de portada🤩. " Seguridad, comprensión, consuelo, todo está en la suave caricia de un dedo o en el roce de unos labios en la mejilla."

Stella y Will son dos adolescentes que padecen la misma enfermedad: fibrosis quística. No tiene cura conocida y en el caso de Will ésta enfermedad es aún más grave porque hace ocho meses ha contraído la bacteria B. Cepacia que lo hace más vulnerable y tremendamente contagioso. Stella ingresa en el hospital porque necesita controlar una fiebre y un dolor de garganta, ya que ambos síntomas pueden resultar muy peligrosos para ella.  Y Will ingresa en el mismo hospital para someterse a un tratamiento experimental. Es entonces cuando se conocen y se enamoran, pero tienen que luchar con la enfermedad que padecen, pues ésta misma es la que les impide estar físicamente juntos. Tal es así que ni siquiera pueden respirar uno cerca del otro, por lo que impondrán la regla de los dos metros. Desde el momento que empecé ésta novela, que está basada en el guión de la película y no al revés como suele ocurrir, ya me hacía una idea de como podía evolucionar, por lo que lo que más me llamó la atención fueron los personajes. Tanto los principales como los secundarios tienen un papel enorme en la historia y todos ellos están muy bien trabajados y me resultaron muy reales. Stella es la típica chica buena y está muy obsesionada con el control de su tratamiento y sus medicinas. Sin embargo, Will es más despreocupado y al contrario que ella, no se toma nada enserio ni sus tratamientos ni sus pautas médicas porque ya lo da todo por perdido. Entre ellos no pueden ser más diferentes pero la obsesión de Stella porque Will se tome las cosas enserio y sea más estricto con su enfermedad hace que se unan irremediablemente. Se trata de una lectura sencilla, directa y ágil que nos cuenta sobre la vida de dos pacientes de FQ (fibrosis quística). Y está narrado, creo yo, desde el mayor respeto, cuidado y con la mayor sensibilidad posible. Pero así como hay cosas que me han gustado, también hay cosas que no me han terminado de convencer. Lo que sí me ha gustado es que hable de esa enfermedad en concreto y que lo haga con ese tacto. Yo sí la conocía pero seguramente haya muchísimas personas que no. Éste libro, que además sólo conozco éste que trate este tema, la da a conocer y también nos deja ver cómo se pueden sentir tanto pacientes, como familias, como el propio personal hospitalario que los trata. También me ha gustado el final. Creo que refleja muy bien ese miedo pero también refleja muy bien la esperanza de estos pacientes. Y por supuesto debo destacar la belleza de la portada. Es maravillosa. Representa muy bien el contenido del libro y además es un guiño a un dibujo que es muy especial para Stella. Por otro lado tenemos lo que a mi personalmente no me ha convencido, pese a ser una lectura que me ha gustado mucho. Lo primero de todo es el instalove. Ese romance que se fragua de forma tan veloz. Es más típico de encontrar en novelas juveniles y en este caso puede que sea porque al final, los pacientes de FQ tienen una esperanza de vida más corta pero aún así... No me ha resultado nada creíble esa forma de enamorarse tan rápido. Y otra de las cosas que no me ha gustado ocurre casi al final. No quiero hacer spoiler pero diré que Stella recibe un mensaje y actúa de una manera que parece que la autora quiere romantizar la enfermedad. Y eso para mi es un no en mayúsculas. Lo rechazo totalmente. No es una historia para todo el mundo. Es dura y se sufre. Al menos a mi me pasó y creo que tiene mucho que ver la edad de los chicos. No considero justo pasar por algo así ni llevar esa vida siendo tan joven, cuando tienes tanto por descubrir y vivir. Pero bueno, así es la vida... Quitando esto último, la historia está llena de sentimiento y conmueve mucho. Es un libro corto y la lectura es entretenida, sencilla y se lee muy rápido. 4⭐ de 5

Como paciente de FQ era muy reacio a leer este libro a miedo de que fuera sin más una novela romántica enmascarada con una enfermedad. Romántica es... La verdad... Pero sí que hace hincapié en el día a día de convivir con FQ, es cierto que hay varias momentos o detalles que no son o no deberían ser reales, como por ejemplo dice que está preparándose la medicación de la diabetes pero se pone hasta arriba de pudding... No cuadra... O por ejemplo, subir 5 pisos con un 30% por cierto de capacidad pulmonar... Eso hay que vivirlo, pero ya os digo, que no se suben más de dos si echar los pulmones por la boca. Pero salvo pequeños detalles que si no sufres en primera persona, puede que no te fijes en ellos, me ha parecido un libro decente, con bastantes momento duros. Lo que más me ha llamado la atención es que en cierto momentos de la historia los padres de él y/o de ella se despiden para volver a verles en 15 días... Se que mis padres nunca leerán esto, pero quiero darles las gracias por no ser así, por estar a mi lado siempre y no dejarme en el hospital ni a sol ni a sombra, sé que con 17 años eso no se valora, pero a toro pasado...no creo que ningún padre dejase de ir a diario a ver a sus hijos si están en el hospital, y más con una enfermedad rara y grave que en cualquier momento puede torcerse. Si alguno habéis leído la reseña completa, os doy las gracias y a la vez os pido perdón por el textazo, pero tenía que soltarlo... En resumen, una novela que te hace pensar, seas paciente o no, que la vida son dos dia, hay que aprovecharla al máximo y disfrutar cada segundo que podemos respirar.

Ha sido toda una sorpresa éste libro. Tengo que ser franco, me rehusaba a leerlo, porque pensaba que era otra historia como “Bajo la misma estrella” de John Green; aunque hay similitudes, es totalmente diferente. Es una historia sencilla con un tema fuerte y unos personajes reales y entrañables. La historia se lee súper rápido, pero se queda en ti por mucho tiempo. Es un viaje de introspección y autoanálisis donde destaca el valor de la vida y la calidad de la misma. Altamente recomendado.

Ayyy Dios mío, que belleza de libro. A pesar de que vi la película hace ya un tiempo y por ende no me sorprendió igual, aún así lo amé. Me llegó, me tocó, me hizo enamorarme de los personajes de nuevo. Will y Stella son de esos protagonistas que inevitablemente se ganan un lugar en tu corazón. Es una historia con muchísima enseñanza. Profunda, especial, de esas de las que te sientes parte. Como humanos nos quejamos por cualquier cosa, y se nos olvida que hay personas verdaderamente peor que nosotros. Que están en la cama de un hospital librando una dura batalla. Que están anhelando la comodidad de un hogar, el calor de una familia, el cariño de unos brazos. Personas anhelando la libertad de respirar aire fresco. Que están luchando por sobrevivir. Cuán importante es valorar, agradecer y vivir tu buena salud y tu buena vida. Y cómo no, la de quienes te rodean. Porque a fin de cuentas es lo que más importa. El amor que damos y el que nos dan. Este libro te lo deja bien claro. «Necesitamos el contacto del ser querido, casi tanto como el aire que respiramos. Nunca comprendí la importancia del tacto, de su tacto… hasta que no pude tenerlo«. 🩵