2666

Simplemente una obra monumental, la edificación del universo narrativo de Bolaño, irónicamente, parece alcanzar su cúspide en una novela inacabada, pero totalizadora.

Esta obra, publicada después de su muerte, puede compararse a cualquiera de las mejores obras de la literatura de todos los tiempos. Una obra que hay que leer despacio para analizar bien lo que el autor nos quiere decir. La Obra puede parecer por momentos pesada porque son como si fueran cinco novelas puestas en un solo libro. He leido que, al parecer, Roberto dejó especificado que se editaran en cinco partes; pero los encargados de sus asuntos literarios no le hicieron caso y consideraron mejor editarla toda de golpe. De cualquier forma en ella nos hace una revisión de como era el siglo veinte para el mundo. La parte de los crímenes es sublime a la vez que aterradora. Lo que es también impresionante es como consigue engarzar las cinco novelas. Es uno de los mejores libros que he leido, Es una lástima que este hombre se nos fuera tan pronto y privarnos de su genialidad.

Es una obra compuesta por cinco novelas, que en lo personal, no concibo leerlas por separado. Creo realmente que es increíble tanto el hilo conductor que une cada parte como cada novela en sí misma. La parte de los femicidios es inmejorable, la descripción, los detalles, todo. Es un placer leer a Bolaño y no con muchas novelas me pasa que no quiero terminarlas para seguir ahí eternamente. Está claramente es una de ellas.

son en realidad 1.5 de puntuación, no me voy a extender mucho la verdad no me gusto para nada son 5 historias muy largas cada una con una cantidad absurda de relleno y que tienen en común pocas cosas y me costo mucho conseguir terminarlo y he de confesar que para ayudarme me salte unas cuantas páginas y la verdad si le hubiesen quitado muchas cosas y de las cinco historias solo hubiesen dejado las historias uno y cinco, mi calificación hubiese sido de 3 estrellas pero como debo calificar todo el libro pues ese es mi puntaje.

La casualidad de una reunión y el aliciente de unas copas compartidas con el escritor Nariñense Albeiro Arciniegas, me llevó a este autor chileno, un nombre que jamás había escuchado y que la verdad, en principio no me suscitaba el mayor interés. Pero como quiera que sea, la novela llegó a mis manos como un regalo inesperado de Arciniegas, y me di pacientemente a su lectura, revisando por lo menos dos veces cada una de sus cinco partes. Terminada la labor, me queda la experiencia algo agotadora, pero grata, de haberme enfrentado a la vertiente creativa de un autor que quiso arriesgarse por una de esas grandes obras de las que habla su personaje, el señor Amalfitano, una obra imperfecta pero fascinante, torrencial, vertiginosa, que ciertamente abre nuevos caminos y perspectivas para la novela contemporánea. Este libro enorme y extraño nos permite recorrer una ciudad imaginaria del norte de México cuyas instituciones sucumben a los embates del narcotráfico, la corrupción, el terrorismo, la miseria, la ignorancia, la sobrepoblación, la inequitativa distribución de los recursos y la indiferencia social. Esa es la sombría y caótica Santa Teresa, bañada en sangre por una serie inacabable de crímenes atroces que allí ocurren, que siempre quedan sin resolver, absolutamente en el olvido propiciado por un sistema judicial incompetente (cualquier similitud con la realidad de México a la Patagonia es mera coincidencia). La forma de narrar de Bolaño me ha dejado con ganas de seguir leyéndolo, sabe crear personajes, paisajes, situaciones, emociones y sensaciones impresionantes, creo que difícilmente he de olvidarme de tipos como los cuatro eruditos de la primera parte (Pelletier, Morini, Espinoza y Norton), de Amalfitano, de Fate, de Archimboldi, de Epifanio y Lalocura, de Haas, de Ingeborg, Ansky, Entrescu y la Baronesa Von Zumpe, en fin. Creo que las cinco partes por sus finales abiertos, y la forma como están escritas, con sutiles referencias de las unas a las otras, permiten una lectura independiente y no necesariamente en la secuencia que ofrece el editor; todas ellas representan la verdadera y arriesgada búsqueda de una nueva novela total, debido a sus personajes que con gracia y humor unas veces y con horror y dolor en otras, nos sumergen en los oscuros laberintos de la mente y el alma humanas, vistas de manera individual y colectiva, a través de un viaje por una civilización en decadencia, tanto en América como en Europa.

Pensé que no lo iba a lograr. De ninguna manera porque haya sido un libro deficiente o porque no me haya gustado, sino porque me impuse un tiempo para poder terminarlo y casi que no lo logro. “2666” de Roberto Bolaño no es un simple libro, es un compendio de varios textos, de varias historias, cada una de ellas con sus personajes, muchos de los cuales coinciden y eso, precisamente eso, es lo que hace querer seguir leyéndola. Quieres saber qué es lo que ha pasado. Qué es lo que va a pasar. Es uno de esos libros que tratan temas disímiles, que muestran el conocimiento en distintas áreas y materias que posee el autor. De esos libros que enseñan, que ponen a pensar, que te hacen viajar a aquellos lugares en los cuales se narra la historia. Es uno de esos libros que no se pueden enmarcar, que, en razón a la variedad de historias y de temas que abarca, puedes ponerle el adjetivo que desees. Es uno de esos libros que se necesita leer. Entre todas las historias, debo señalar que las que más me apasionaron fueron las de los críticos y la de Archimboldi. La primera atrapa, hace querer saber más. Te inmersa en el universo trazado por el autor; la segunda, impone el hasta dónde, porque ese personaje puede definirse nada más y nada menos como “portentoso”, fuera de lo común, con una historia muy interesante que contar. Con un carácter que lo pudo haber mostrado como un héroe de aquellos mitológicos, pero que, en forma más que acertada, lo muestra cómo lo que es, un ser humano, con sus aciertos y, mejor aún, con sus defectos. Lo largo del texto cuesta. Se debe tener paciencia. Se debe aprender a tolerar, a respetar aquello con lo que no estamos de acuerdo. Pero si me preguntan si: Valió la pena? La respuesta será: por supuesto que la valió. Leeré más obras del autor y espero que siga valiéndola.

Para mi 2666 es una obra magistral. Bolaño se tira a una piscina de la que pocos podrían salir airosos, quizá por esa necesidad casi común a todos los autores de escribir historias con un final concreto, definido, que cierre la historia. Aquí, esa historia no es tal, son varias y algunas confluyen en algún o algunos puntos. Esta es una obra caleidoscópica que a pesar de su envergadura acaba sabiendo a poco.

Demasiado largo, al unir varias novelas en un solo libro te obligan a leerlas todas de golpe. Aún así hay pasajes sublimes, la parte de los crímenes es una delicia de leer pese a lo sórdido del relato, allí un Bolaño en estado de gracia sienta cátedra prácticamente en cada párrafo. Sin embargo la parte final del libro, lo que sería la última novela, me resultó pesada y aburrida.